El pueblo ya no confía en las autoridades: inseguridad y corrupción en aumento
- Redacción
- 13 nov 2018
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La Seguridad Pública municipal en Jocotitlán se ha convertido en el talón de aquilies de Iván de Jesús Esquer Cruz alcalde de este importante municipio del norte mexiquense y, es que los índices delictivos aumentan de manera increíble.
Aunque Esquer Cruz ante los medios de comunicación asegura que en materia de seguridad avanzan a pasos agigantados la población tiene otra versión pues desde Enero de 2016 y hasta la fecha no se han visto cambios o mejoras en este rubro.
Además de abigeato, robos a casas habitación, venta de sustancias nocivas, secuestros, asaltos, robo de autopartes ahora se suman delitos como huachicoleo, asesinatos y violaciones estos últimos son los delitos que han tenido lugar en las diferentes comunidades que integran el municipio y las autoridades siguen sin implementar las estrategias necesarias para disminuir la ola de violencia y delincuencia que se vive en Jocotitlán.
robo a transportistas, asalto a transeúnte, robos de vehículos, abigeato y violaciones. De acuerdo al Secretariado Ejecutivo Nacional de Seguridad Publica, en el último semestre de 2018 en Jocotitlán, se registraron 39 reportes por
Los habitantes del municipio aseguran que el mayor culpable de esta situación es Iván Esquer ya que en lugar de ocuparse de temas y acciones prioritarias en materia de seguridad se mostró más preocupado por darle continuidad a su mandato.
Por lo que, todo indica que los jocotitlenses continuarán viviendo las repercusiones del fracaso de la estrategia de seguridad pública en el municipio pues es evidente que no se cuenta con avances significativos en la materia al no estar garantizada la tranquilidad de los ciudadanos a pesar del gasto de millones de pesos que se le destinan a este rubro.
La indiferencia y el desinterés de las autoridades municipales han hecho que los pobladores ya no denuncien y vea los actos delictivos como algo natural, que no puede evitar, sin embargo, no debemos perder la sensibilidad y considerarlos la ola de inseguridad y delitos como una mera estadística, sino como fenómenos particulares, que a la larga afectan a toda la sociedad.
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