El silencio de los inocentes

A casi dos meses de culminar su mandato en el municipio de Acambay, Irineo Ruíz González, sigue sin dar solución a la serie de problemas e irregularidades que surgieron dentro de su administración. Ahora, también prohibió, a quienes están bajo su mando, no dar ningún tipo de información a los medios y menos si ésta puede perjudicar o poner en duda su trabajo en el municipio.

Entre los problemas que se detectaron desde que comenzó la administración de Ruíz González, y que prevalecen, son el aumento de casos de maltrato infantil y la iniciativa que tiene el ayuntamiento por apropiarse de un mercado construido para los acambayenses.

Varios de los habitantes de este municipio se preguntan ¿para qué el edil quiere apropiarse de ese mercado, si ya tiene el municipal, y quienes venden ahí, van a tener que pagar más y todo para seguir enriqueciendo los bolsillos Ruíz González?

Lo anterior representa una gran incomodidad para el actual edil, porque entre menos se hable de la realidad, menos problemas que solucionar, como se dice “ahogado el niño, a tapar el pozo”. Es entonces, clara la postura del presidente municipal “no hay ningún problema en el municipio y, si lo hubiera, nadie está autorizado para proporcionar esa información, debido a que se acerca el final de mi administración”.

Ismael, oriundo de Acambay, dice “¿qué más ocultará el presidente? Seguramente antes de irse quiere llenar más su cartera y que el pueblo se joda”.

Lo que es evidente es que, aunque la información no se otorgue, quienes viven en este municipio se percatan de lo que sucede y no están de acuerdo. Sin embargo, se dicen sabedores de que no pueden hacer nada, pues nunca van a ser escuchados y, menos, si esto afecta los intereses de quienes están en el poder.

Probablemente, la única esperanza que les queda es que la futura alcaldesa sí trabaje para mejorar la situación actual del municipio y, que no haga caso omiso de las necesidades de los habitantes de Acambay.

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