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Hermanos Peña Nieto: Represores y despilfarradores del dinero del pueblo.

  • Por la redacción.
  • 3 jun 2015
  • 6 Min. de lectura

El pasado domingo 31 de mayo, aproximadamente a las 11:30 de la mañana, el Director General y fundador de la Revista QUADRO INFORMATIVO, el Lic. Igmar Zárraga Domínguez asistió al evento que con motivo del Cierre de Campaña Proselitista de la candidata del PRI a la Presidencia Municipal de Atlacomulco, la Señora Anna María Chimal Velasco, se realizó en la Plaza Cívica de la cabecera municipal. El propósito del Director de QUADRO INFORMATIVO consistió en darle cobertura al cierre de campaña de la candidata del PRI y poder generar una nota informativa que se difundiera en su portal de internet. Fue así, que al llegar en su automóvil sobre la Avenida José María Morelos en su lado poniente, Igmar Zárraga se percató que los espacios disponibles para estacionarse sobre la vía pública estaban totalmente ocupados por varios vehículos –seguramente que eran propiedad de los militantes y simpatizantes del PRI que acudieron a apoyar a su candidata- lo que obligó al reportero a estacionarse metros más adelante, en la intersección de la vialidad antes citada con la Avenida Juan N Reséndiz.

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Al descender se su vehículo y al caminar sobre la Avenida Morelos para llegar a la Plaza Cívica donde se desarrollaba el evento, el Director de QUADRO INFORMATIVO se percató de que a un lado de la acera se encontraba estacionada la patrulla de la Policía Municipal de Atlacomulco con número de placas 21-156 y metros más hacia arriba, también se encontró otra patrulla de la misma policía municipal que portaba la placa SPM-006. Al estar cerca del lugar del evento priísta, Igmar Zárraga se topa con una tercera patrulla de la Policía Municipal que obstaculizaba la circulación en la intersección de la Avenida ATA y la Avenida José María Morelos, justo en las esquina norponiente del Palacio Municipal. Allí se encontraba un efectivo de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, bloqueando la vialidad y custodiando la patrulla SPM-004.

Fue así que, metros más adelante, al estar muy cerca del templete donde se desarrollaba el cierre de campaña de Anna María Chimal Velasco, el reportero de QUADRO INFORMATIVO, se percató de que a un costado de la Escuela Primaria Rafael Favila, estaban estacionadas CINCO camionetas de color negro de la Marca Chevrolet, tres de las cuales contenían en su interior a igual número de tripulantes y una más de color blanco de la marca JEEP. Esas camionetas, por su apariencia, llamaron la atención de Igmar Zárraga, pues son similares a las que utiliza el personal del Estado Mayor Presidencial que realiza labores de guarda y custodia de servidores públicos del ámbito federal. Así, al tratarse de un evento partidista en el que no debería estar presente funcionario público alguno, en primera instancia resultaba injustificada la presencia de las camionetas con las placas MJJ-3086 y MST-2311 del Estado de México; así como también las que portaban las placas 261-ZRZ, 252-ZRZ, 729-YWS, estas últimas del Distrito Federal, toda vez que deben ser utilizadas para los servidores públicos que estén atendiendo funciones propias de su encargo, en horario de labores y cuando por la naturaleza de sus actividades esté en riesgo su integridad física.

Sin embargo, resulta que de acuerdo con versiones recabadas por el reportero, la presencia de ésos efectivos del Estado Mayor Presidencial se debía a que eran los responsables del traslado de dos hermanos de Enrique Peña Nieto que asistieron al evento de Anna María Chimal. Los hermanos eran Arturo y Verónica y, al parecer, su presencia y asistencia al acto proselitista de la candidata del PRI fue el motivo por el cual, la Policía Municipal de Atlacomulco cerró la vialidad que pasa por la Escuela Rafael Favila. En este sentido, también resulta indignante el hecho de que los hermanos del Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, sin desempeñar cargo alguno en la Administración Pública Federal o de cualquier otro nivel de gobierno, gastaran gasolina, choferes y guaruras pagados con el dinero del pueblo, con el propósito de asistir a un evento proselitista de su concuña.

Al verse sorprendidos por Igmar Zárraga, los efectivos del Estado Mayor Presidencial, rápidamente descendieron de sus vehículos para abordar al reportero y en una actitud hostil y prepotente le exigieron que borrara las fotos que había tomado, con la amenaza de que le quitarían el equipo con que las había tomado. Incluso, uno de ellos se ostentó como autoridad para exigir en tono déspota y amenazante, que en su presencia se borrara las fotografías. Igmar Zárraga no vaciló en enfrentar a los guaruras del Estado Mayor Presidencial que trajeron a los hermanos Peña Nieto y les reiteró, con determinación y valentía, que no les iba a entregar nada y que, en su caso, si había cometido un delito, que actuaran en consecuencia para ponerlo a disposición a una autoridad competente.

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Ante ésa respuesta, uno de los guaruras que jocosamente se identificó como “PEDRO INFANTE” vaciló y, al saberse sorprendido por la inesperada reacción del Director de QUADRO INFORMATIVO, esto fue lo que le dijo:

  • “Bueno, te pido que borres las fotos porque no sé si me vayas a secuestrar.”

Otro de, señalando con el dedo índice al Director de QUADRO INFORMATIVO, agregó:

  • “Te hago responsable de lo que nos llegue a pasar de aquí a la entrada de la ciudad.”

Mientras esto sucedía, un tercer elemento del Estado Mayor, se movilizó para solicitar la intervención de dos elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana que estaban controlando el tráfico vehicular sobre la Avenida Isidro Fabela, a la altura de la Plaza Cívica municipal, a quienes les hizo creer que una persona “estaba causando desorden y agrediendo” a los guaruras de los hermanos de Enrique Peña Nieto. De manera inusual, rápidamente llegaron los efectivos de la policía del Estado de México para tratar de detener a Igmar Zárraga Domínguez –quien estaba en una actitud tranquila y cercado por los elementos del Estado Mayor a un costado de la Plazoleta. Al percatarse de que todo era un engaño, pues no había ningún tipo acto violento ni mucho menos de alteración del orden público por parte de Igmar Zárraga Domínguez, los agentes de seguridad mexiquenses saludaron al Director de QUADRO INFORMATIVO y mostraron una actitud más prudente para dialogar con él, toda vez que los agentes del Estado Mayor Presidencial les solicitaron su mediación y les explicaron que lo que demandaban era que Igmar Zárraga Domínguez borrara las fotografías que momentos antes les había tomado a sus vehículos.

Por increíble que parezca, y para hacer aún más grave la detención ilegal del Director de QUADRO INFORMATIVO, los policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, inmediatamente tomaron partido en favor de los agentes federales. Ellos también se dirigieron a Igmar Zárraga para pedirle que accediera a borrar las fotografías con el siguiente argumento:


  • “Ellos (los guaruras) tienen derecho, jefe.”

Sorprendido y visiblemente molesto con los policías mexiquenses, el Director de Quadro Informativo les cuestionó airadamente:

  • “¿Cómo es posible que Ustedes también me pidan eso? ¿De qué lado están? ¿Dónde queda la libertad de prensa? ¿Dónde está el respeto a mis garantías individuales?”

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Como era de esperarse, los policías mexiquenses no pudieron responder a las preguntas que les planteó Igmar Zárraga Domínguez y, al percatarse de que varias personas se estaban acercando para brindar auxilio al ofendido, optaron por guardar silencio y esperar a que los minutos transcurrieran. En cambio, los guaruras de Arturo y Verónica Peña Nieto, insistían en mantener retenido al Director de QUADRO INFORMATIVO, pero luego de que escucharon que éste había solicitado por vía telefónica, la intervención de su abogado, inmediatamente se retiraron del lugar y dejaron el paso libre al ofendido.

Asimismo, trascendió que, pasado el medio día y después de finalizado el acto de cierre de campaña de Anna María Chimal Velasco, los mismos efectivos del Estado Mayor Presidencial trasladaron a los hermanos del Presidente de la República a la casa donde habita la mamá de la candidata del PRI a la alcaldía de Atlacomulco, donde esperaron por más de una hora a que intercambiaran felicitaciones, saludos y abrazos por el desangelado y atropellado cierre de campaña.

Estos hechos son una muestra pequeña de la descomposición en la que se encuentra sumida nuestra clase política, no sólo municipal sino también la que representa, en el ámbito federal, el propio Enrique Peña Nieto. La prepotencia, el autoritarismo, el despilfarro de los recursos públicos al utilizarlos para fines personales y la violación a las garantías individuales son actitudes que siguen presentes en los líderes y dirigentes del PRI, a las cuales no pueden ni quieren renunciar, porque ello equivaldría a poner en riesgo el régimen de corrupción y de ilegalidad del que se benefician. Lo que le sucedió a Igmar Zárraga es un vaticinio de lo que pudiera esperarle a miles de atlacomulquenses más, sin con su voto, decidieran seguir apoyando al PRI de siempre y a su régimen de injusticia, empezando por Anna María Chimal Velasco.



 
 
 

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